Pepe Caballero en la peña Duende de Madrid
22 de febrero de 2013
En Andujar, además de profesionales históricos como Rafael Romero y José Yllanda, siempre ha habido gran cantidad de aficionados que han cantado, alguno todavía lo hace, muy bien.
Rafael Romero le mencionaba a su amigo y paisano Paco “El Pecas” muchos de los que el maestro conoció en su juventud: El Chulo, El Lápiz, Sordillo de la Luna, Galallo, El Mengui, Pierre, El Bolera, Pirriqui, El Cuca, La Mototo, El Potaje, El Guapo, Rinrrín, El Almendrica, Rafael Mendoza, etc, etc.
En la actualidad los iliturgitanos Paco “El Pecas” y Pepe Caballero son los más importantes.
Y fue este último el que hizo un memorable recital en la entrañable peña madrileña Duende, que más que peña es un milagro hecho realidad por la gran constancia y afición de sus socios.
Le acompañó la sonanta de Pepe Núñez, guitarrista de gran experiencia y titular de la peña.
Pepe es un cantaor de los que no se guarda nunca nada siempre da todo lo que tiene, que es mucho, y lo hace con una entrega y una verdad que a mi me gustaría encontrar en algún que otro profesional de los de mucho fuste.
Para él los cantes de raíz no tienen secretos y conoce muchos estilos.
Esta vez hizo los siguientes cantes:
Dos Malagueñas, una de Aurelio Sellés y otra de la Trini rematando con un cante de Lucena. Todo bien matizado y con gusto
Siete estrofas por Soleá con los estilos de Joaquín el de la Paula, cuatro de ellas, otra de Ramón el Ollero, una del Mellizo y otra más de Cádiz. Rebuscándose y con mucho temple, ¡qué es lo difícil!.
Tres Peteneras, dos chicas y una grande. Bien dichas y acordándose de su referente Rafael Romero.
Cuatro letras de Tientos y otras tantas de Tangos con aromas de Gaspar de Utrera en los Tientos y de Extremadura y Triana en los Tangos. Una delicia
La Caña, extraordinaria y de nuevo rememorando a “El Gallina”, maestro en este cante. Tuvo la originalidad de rematar con una Bambera muy acompasada.
Tres conmovedoras Seguiriyas por los estilos de Paco la Luz, Marrurro y Juan Junquera.
Otra vez recordó a Rafael Romero en las tres Rondeñas que hizo magistralmente a continuación y que remato con una bellísima Jabera, cante este último poco escuchado probablemente por la dificultad que encierra.
El remate del recital fueron cinco tremendas Soleares del Zurraque trianero evocando a maestros como Pinea, el Ollero y el Quino.
A todo esto Pepe Núñez le asistió en todo momento con el respeto y profesionalidad que todo buen tocaor debe tener para con un buen cantaor.
Fue una noche para buenos aficionados.
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